Si bien hay mucha información sobre el impacto de la leche materna o la fórmula infantil en el crecimiento y el desarrollo, la alimentación complementaria bebé ha recibido menos atención. Por ello, hoy queremos ofrecerte pautas y consejos sobre la mejor manera de presentar la alimentación complementaria del bebé. En general, se sugiere la lactancia materna durante al menos 4 meses, preferiblemente 6 meses, seguida de la introducción de alimentación complementaria.
¿Qué es la alimentación complementaria?
Llega un momento en el que el consumo de alimentos y líquidos como la leche materna, la fórmula infantil o las fórmulas de continuación ya no son suficientes para satisfacer las necesidades nutricionales de los bebés. Es el momento de lo que se conoce como alimentación complementaria. Es importante que las madres conozcan la guía de la alimentación complementaria para determinar cómo y cuándo introducirla. La dieta del bebé tendrá modificaciones significativas como resultado de la exposición a diferentes alimentos, sabores y experiencias alimenticias. Esta alimentación no solo debe proporcionar una ingesta suficiente de macro y micronutrientes para alcanzar el crecimiento y desarrollo ideales del bebé durante los primeros dos años de vida. También debe promover condiciones de salud positivas durante la vida temprana y posterior del bebé. Actualmente se está debatiendo el mejor momento para la introducción de la alimentación complementaria y la naturaleza de los alimentos que deben proporcionarse al bebé. Sin embargo, las recomendaciones actuales respecto a la lactancia materna y la alimentación complementaria, varían sustancialmente de un país a otro. Como resultado, se requieren estudios más profundos, así como iniciativas y políticas específicas para alcanzar un consenso generalizado. El objetivo de este artículo sobre alimentación complementaria y lactancia materna, es proporcionar información actualizada sobre el momento y la forma en que debe introducirse.
¿Cuándo y cómo introducir la alimentación complementaria en la dieta del bebé?
Se aconseja la lactancia materna hasta que el niño cumpla los seis meses de edad. Después de esto, se debe introducir la alimentación complementaria para bebés junto con la lactancia durante dos años o más con el objetivo de abordar las carencias de energía, hierro y otros nutrientes necesarios. No obstante, aunque los encargados de las políticas de salud aceptan de manera abrumadora este enfoque, la introducción de la alimentación complementaria varía mucho entre países de ingresos bajos y altos, e incluso dentro de Europa. Mucho de esto tiene que ver con las tradiciones culturales de cada nación. Por ejemplo, se sabe que el 37% de los lactantes menores de 6 meses en los países de bajos ingresos reciben lactancia materna exclusiva. En el caso de la alimentación complementaria del bebé, se introduce entre el primer y el tercer mes de vida en los países de bajos ingresos, y no es así en los países más desarrollados. La decisión de introducir la alimentación complementaria para bebés también está influenciada por el crecimiento y las necesidades nutricionales de los infantes. La dieta del bebé se vuelve más variada en términos de sabores y texturas de los alimentos durante los primeros años de vida.
Consejos y pautas para comenzar la alimentación complementaria en bebés
Es necesario fomentar la lactancia materna exclusiva durante al menos 4 meses. La alimentación complementaria del bebé no se debe ofrecer antes de los 4 meses de edad. Tampoco debe retrasarse más allá de los 6 meses, ya que es indispensable para el desarrollo y la obtención de nutrientes. - Cuando la leche materna no lo hace, se deben proporcionar alimentos complementarios que satisfagan los requisitos nutricionales de los bebés. Estos alimentos deben tener la textura y consistencia adecuadas para la etapa de desarrollo del bebé. - Evitar los zumos de frutas y las bebidas endulzadas con azúcar durante los primeros años de vida. Los alimentos complementarios no deben tener sal ni azúcar. - Todos los niños deben complementar su alimentación con alimentos ricos en hierro, incluyendo los de origen animal y / o comidas enriquecidas con hierro.
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